España: 4 escapadas para vivir el verano intensamente

Aún queda verano por delante y te arrepentirás si no lo aprovechas. Es la estación que más se presta a exprimirla al máximo. A vivirla intensamente. Y no, no hace falta que te marches hasta Indonesia para disfrutar de un verano cargado de planes: sin salir de la Península, tus fines de semana pueden ser toda una aventura.

1. En busca de las calas desconocidas de Almería

Andalucía en verano puede resultar sinónimo de turismo masivo. Pero siempre hay rincones escondidos que solo los más aventureros logran descubrir. En Almería, por ejemplo, junto a sus populares playas kilométricas podemos encontrar calas recónditas en las que disfrutar únicamente de la compañía del mar (y de quien nosotros deseemos).

La Cala del Plomo, entre Las Negras y Agua Amarga, es un paraíso natural que te transportará directamente al Caribe; la Cala de Enmedio, que se puede alcanzar caminando desde la anterior, te sorprenderá por su arena fina y sus dunas fosilizadas; y la Cala el Sombrerico, entre Mojácar y Carboneras, es un escenario de cine: ahí se rodó, en 1972, la película ‘La isla del tesoro’, de Orson Welles y, aun con todo, sigue siendo un lugar más bien desconocido y un destino en el que perderse.

 

2. Roadtrip por Extremadura

Si leíste ‘La España vacía’, de Sergio del Molino, y te quedaste prendado de esos paisajes y vidas que describe, un roadtrip por esa parte del país es un plan sin igual para exprimir al máximo tu verano.

¿Has pensado en darle una oportunidad a Extremadura? Una de las grandes olvidadas, esta tierra de interior tiene maravillas patrimoniales que ofrecernos, como el teatro romano de Mérida, el puente de Alcántara o el casco histórico de Coria, Cáceres o Trujillo. Y territorios vírgenes donde la modernidad apenas se siente, como la Sierra de Gata. Allí, entre su frondosa vegetación regada de piscinas naturales, encontramos la pequeña pedanía de Trevejo. Su arquitectura en piedra, comandada por un castillo medieval en la colina, enamora a los visitantes más místicos y aventureros.

 

3. Descanso en la Toscana española

Descansar donde pocos más lo han hecho, conocer lo que pocos conocen. Muchas zonas de España nos permiten disfrutar de este pequeño gran lujo y una de ellas es la comarca del Matarraña, en Teruel.

Con pueblos bellísimos, como Valderrobles o Calaceite, esta zona condensa todos los planes que te pueden apetecer en un fin de semana estival en solo unos kilómetros cuadrados. ¿Relax y distinción? El Hotel Consolación es tu destino. ¿Un baño en una piscina natural? No te pierdas las pozas de El Parrizal (Beceite). ¿Lo tuyo son los viajes gastronómicos? Dale un capricho a tu paladar con los platos del Hotel Cresol.

 

4. Música en Sonorama Ribera

Los festivales de verano son un clásico de la temporada. Y, en la inmensa oferta que existe, Sonorama Ribera se posiciona como el más adecuado para quienes quieran huir de los tópicos festivaleros.

Se celebra en Aranda de Duero (Burgos) en torno al puente del 15 de agosto. Y, aunque los conciertos son importantes, tanto o más lo es el ambiente familiar que se genera en él, tanto en el camping como en el pueblo. Porque Sonorama Ribera es algo así como unas fiestas de pueblo indies: durante el día, la actividad se concentra en la plaza del Trigo del municipio, con sus conciertos gratuitos y sus vecinos volcándose con el festival.

De camino, no dudes en parar el El Burgo de Osma y conocer este tranquilo y singular pueblo soriano y los campos de girasoles que lo rodean.

 

Deja una respuesta